Prevalencia de VIH sífilis, hepatitis virales y tuberculosis en unidades penales federales

    Año de publicación: 2018

    INTRODUCCIÓN En Argentina, son escasos o nulos los datos para caracterizar epidemiológicamente a este universo en relación con VIH, infecciones de transmisión sexual (ITS), hepatitis virales y tuberculosis (TBC). OBJETIVOS Determinar la prevalencia de a) sífilis; b) hepatitis B y C; c) VIH; y d) tuberculosis. Obtener información que permita caracterizar a la población alojada en los centros de detención del Servicio Penitenciario Federal (SPF) en torno a tres dimensiones: a) prácticas sexuales, exposición y estrategias de cuidado frente a ITS; b) prácticas vinculadas con el consumo de drogas y la exposición a infecciones por vía sanguínea; y c) percepción del propio estado de salud con relación a ITS y antecedentes diagnósticos. MÉTODOS Se realizó un estudio observacional multicéntrico de corte transversal en 6 establecimientos del SPF. La investigación serológica fue acompañada de una encuesta autoadministrada, que relevó datos sociodemográficos, prácticas sexuales, exposición y estrategias de cuidado, consumo de drogas, percepción del propio estado de salud y antecedentes de ITS, infecciones de transmisión sanguínea y TBC. La muestra involucró a un total de 2277 detenidos/as, correspondiente al 22% de la población del SPF. RESULTADOS Se registraron las siguientes prevalencias sífilis 6,8% (IC95%: 5,8%-7,7%), IgG AntiHBc 6,08% (IC95% 5,62%-6,54%), hepatitis B crónica 0,51% (IC95%: 0,37%-0,65%), hepatitis C 3,3% (IC95%: 3%-3,6%) y VIH 2,7% (IC95%: 2,4%-3%), mientras que la tasa de prevalencia de TBC fue de 29,6/100000 (IC95%: 29,5-29,7). DISCUSIÓN Los hallazgos demuestran la alta prevalencia de las infecciones estudiadas en la población carcelaria y refuerzan la necesidad de desarrollar intervenciones que faciliten el acceso a la prevención, el diagnóstico y la atención. Las cárceles federales tienen un 15% del total de personas encarceladas en Argentina. El proceso de preparación y el desarrollo del trabajo de campo permitieron tejer nuevas redes y fortalecer algunas ya existentes, lo que debe ser sostenido en el tiempo.

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