Los trastornos del espectro autista (TEA) comprenden desórdenes neuropsiquiátricosde prevalencia en aumento en Europa y Estados Unidos. Su detecciónprecoz es la intervención más eficaz para reducir la discapacidad futura del niñoafectado.ObjetivosSistematizar la vigilancia de TEA en niños de 18 a 30 meses en la consulta pediátricaambulatoria del Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez, en la ciudad deBuenos Aires.MétodosSe implementó un protocolo de pesquisa que incluyó el M-CHAT con su entrevistade seguimiento (ES) y un flujograma diagnóstico, que se sirvió de herramientasutilizadas en estudios similares. Los resultados fueron sometidos a lavaloración interdisciplinaria de un equipo experto en la temática.ResultadosSe incluyó a 266 pacientes presuntamente sanos que habían concurrido al controlde salud. Se detectó a cuatro niños con TEA y a cuatro con otros trastornos.Se descartaron alteraciones del desarrollo en 258. La sensibilidad del M-CHATfue del 100%, con una especificidad del 66%. El valor predictivo negativo (VPN)fue del 100%; el valor predictivo positivo (VPP), del 4%. Una vez sumada la ES,el VPP fue del 31% y el VPN, del 100%, con una sensibilidad del 100% y una especificidaddel 90%. El diagnóstico se logró en un promedio de tres meses.ConclusionesSegún los datos conocidos, se trata del primer intento de sistematizar la vigilanciade TEA por medio de herramientas específicas de pesquisa, en el controlde salud de un hospital público de la ciudad de Buenos Aires. El M-CHAT se integróal control de salud, y su aplicación se optimizó con la ES. La evaluacióndiagnóstica subsiguiente por parte de un equipo interdisciplinario resultó fundamental.La aplicación de este protocolo podría contribuir, por un lado, a reducirlos gastos sanitarios que genera la ausencia de medidas pensadasespecíficamente para esta patología y, por el otro, a sentar las bases para el desarrollode la capacidad clínica y de investigación sobre TEA en Argentina.